Churumbea: ¡Adios al pañal!

¿Os acordais que los reyes nos dejaron este libro?
He de decir que he sido una mala lectora y solo he leido el principio, los 4 primeros dias, y luego he ido adaptándome a la niña según surgian las cosas.

Pues la Semana Santa a parte de muy mal tiempo y de enseñarnos a partir almendrucos, nos ha dejado sin pañales.

Os cuento como MiniJu lo ha conseguido.

El verano pasado cuando ella tenia unos 20 meses le compré este libro:

Maribel tiene algo muy importante que hacer, algo que hace cada dia, y ella suele ser muy puntual en eso de sentarse en el orinal, pero alguien se lo ha quitado, asi que lo busca por toda la granja.

Es muy divertido de leer tanto para los adultos como para los niños, puedes poner diferentes voces, hablar de lo que está bien y de lo que no... La verdad es que MiniJu se lo pasa genial con el libro e incluso lo "lee "en voz alta.

Y para su cumple este otro:

La mamá de Lulú le trae un regalo especial: un orinal. La historia es la del proceso de aprender a usar el orinal pero el atractivo es que es interactivo, puede abrochar el pañal de Lulú, abrir una puerta e incluso mirar debajo de su falda para saber si usa pañales...

Han estado accesibles a ella en todo momento, unas veces en la habitación, otras en el cuarto de estar, otras en el baño.

La idea es que tubiera contacto con el "Mundo Orinal" através de lo que más le gusta, que son los cuentos.

Al final este ha sido el resultado:

Cuando tiene ganas se acerca al orinal y se quita la ropa

Se sienta y se dispone a usarlo

Se concentra en la tarea

Comprueba el futo de su trabajo

El proceso:

Un par de dias antes le conté que en el pueblo dónde hemos pasado las vacaciones de Semana Santa no vendían pañales, por lo que si se acababan ya no podríamos comprar más.

Asi que el primer día en cuanto se levantó la puse en el orinal (ya había estado sentada en él otras veces, antes de quitarle definitivamente los pañales, e incluso lo habia estrenado, por ejemplo antes de bañarla o cuando lo pedia ella) y consiguió hacerlo. Durante todo el dia la fui poniendo cada hora y media, tal y como aconseja Mª Luisa Ferrerós en su libro. Hubo bastantes fugas, bien porque cuando se habia sentado se había levantado demasiado deprisa, o porque no la convencía para sentarse.

El segundo dia hubo la mitad de escapes, el tercero uno solo, y a la semana ya iba ella sola al orinal sin necesidad de recordárselo.

El pañal de por la noche sigo poniéndoselo, pero no es necesario, ya que no lo usa ninguna noche. A ella le conté que nos quedaban pocos pañales y que debiamos usarlos por las noches por si acaso no nos despertábamos.

A pesar del tiempo que ha hecho, hemos salido de casa, y en un par de ocasiones tubimos que volver por un descontrol, asi que creo que eso la ayudó a comprender mejor las consecuencias, de hecho no ha vuelto a tener fallos fuera de casa y lo pide y lo hace sin problemas.

El control de las heces costó un poco más, pero al cuarto dia ya lo hizo en el orinal.

Por supuesto que no la hemos regañado cuando se lo ha hecho (salvo en una ocasión que me puse demasiado nerviosa y le dije que me habia enfadado con ella porque la acababa de preguntar que si queria usar el orinal y tras la negativa se lo hizo encima, lo sé esta fatal, pero soy humana), y la hemos felicitado cada vez que lo ha conseguido, y todabia lo hago...

Uno de los motivos que me animó a intentarlo fue que desde hacia 3 o 4 meses ella controlaba bastante bien su tubo de escape, y cuando se lo sugerias o ella queria dejaba salir una explosión. De lo cual yo deduje que no sólo era capaz de identificar el momento en el que hacia pis o caca sino que además podía controlar los esfínteres.

Como en todo proceso de aprendizaje, y de asimilación de nuevas rutinas o conceptos, se ve reflejado en lo que ella hace con su bebé, de hecho ha sido un ayudante incondicional y compañero de orinal, y aqui os muestro unas fotos de cómo ella le enseña