Así es como empezó la tarde, y ya sabemos que cuando un niño está en un periodo sensible hemos de ofrecerle lo que tengamos a nuestro alcance para satisfacer su curiosidad o su interés.
En casa tengo tizas para suelo, esperando a que llegue un buen rato de sol y desaparezca el mal tiempo para que la obra perdure, mientras tanto, la usamos en cartulina de color:
Con la primera tiza se animó bastante, pero cuando cogió otra, no pudo evitar colocarlas, primero en linea y después en la caja. La imagen me recuerda a los bloques de colores de Montessori
